Son bicicletas muy cómodas con el mismo funcionamiento que
una convencional, sólo que al llegar a la oficina, al montarte en el metro o al
entrar en el ascensor, la pliegas y te la llevas puesta.
Los puntos fuertes de las plegables son:
Intermodalidad. Si vives muy lejos de tu destino, puedes
combinar la bicicleta con el tren, metro o autobús. Estos medios suelen tener
restricciones para las bicicletas: en el bus no se puede, en el metro sólo los
fines de semana y en el cercanías sólo fuera de las horas punta. Con la plegable
no hay ese problema.
Miniapartamentos. Si no tienes sitio para guardar la bici en
casa y no quieres que te la roben en la puerta de tu propia casa, pues con una
plegable no tienes problema, la puedes guardar en cualquier rincón.
Robos. Una plegable puede estar contigo siempre, en el cine,
en la oficina o en la tienda. Al no dejarla atada en la calle no hay
posibilidad de que te la roben.
Nómadas. En los barcos, caravanas y demás viviendas móviles
las bicis plegables son un medio excelente de moverse cuando la
"casa" está aparcada/amarrada.
Los puntos fuertes de las plegables son:
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